La nueva vieja política y las ausencias de siempre
LETRA CHICA: análisis, información y datos para entender la política.
Hola! Cómo estás? Te saluda por aquí Maca Maristany, contenta de estar escribiendo por primera vez en esta sección en la cual me parece interesante y hasta desafiante acercarte algunas consideraciones de este último tiempo respecto a las elecciones, campañas y la lectura entre líneas que estas nos dejan.
Con el inicio del 2023 y conforme se iba delineando el escenario electoral, personalmente me surgieron los mismos interrogantes que en años anteriores: ¿Qué pasará con la participación de las mujeres y disidencias en las listas? ¿las propuestas están mínimamente dirigidas a la juventud? ¿tienen estos espacios real intención de representación a las minorías? Y por supuesto que estando tan cerca de las generales, estas preguntas ya tienen algunas respuestas.
A por ellas…
Mujeres y diversidades
Pese a que 22 provincias argentinas y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires cuentan con ley de paridad, tanto en la disputa por los gobiernos provinciales como en las elecciones nacionales, la participación de las mujeres y personas lgtbqi+ fue menor en algunos lugares y directamente nula en otros, dejándonos un mapa electoral netamente masculino a lo largo y ancho del país. Repasemos algunos ejemplos.
En el Chaco, las PASO se llevaron a cabo el pasado 18 de junio y el próximo domingo 17 de septiembre se definirá quien es el nuevo gobernador. En aquella primera instancia, se presentaron en total diez fórmulas encabezadas en su totalidad por varones.
Lo mismo sucedió en provincias como Formosa o Mendoza con cuatro y diez fórmulas respectivamente, de las cuales, ninguna llevó a una mujer como cabeza de lista. O en La Pampa, en donde todos los candidatos a la gobernación fueron varones y todas las candidatas a vice, mujeres.
En el caso de San Luis, fueron ocho las fórmulas con dos candidatas mujeres y en el caso de Córdoba y Salta, doce fórmulas con tres mujeres encabezando.
Hay dos provincias sin ley de paridad: Tucumán, que contó siete listas y sólo una mujer compitió por la gobernación; y Tierra del Fuego, en donde hubo cinco listas, sólo dos de ellas con mujeres a la cabeza.
Además, según un informe publicado por el Observatorio de Datos con Perspectiva de Género "Data Género", de las 305 listas que se presentaron para ocupar un lugar en la Cámara de Diputados, solamente el 32% estuvieron encabezadas por mujeres. En tanto que en el Senado se presentaron 97 listas, 30 encabezadas por mujeres.
Es así que, si bien hubo una leve mejoría en comparación a relevamientos realizados en años anteriores, la división por géneros de las cabezas de listas tanto para ocupar cargos legislativos como para el acceso a puestos de poder provinciales y nacionales en general, en ningún caso se superó aun el piso del 32%.
¿Y la juventud?
Junto al equipo de Droit estuvimos presentes en la Feria de Empleabilidad en la Universidad Católica de Salta y, por supuesto, aprovechamos la ocasión para conocer qué piensan los más jóvenes respecto a los principales candidatos presidenciales.
Para sorpresa o no del equipo, en un ejercicio de escucha y entendimiento de emociones, colocamos una nube de palabras y pudimos ver que Javier Milei es, por lejos, el preferido de los estudiantes. Mientras que Sergio Massa es el más odiado y Patricia Bullrich queda en el lugar menos beneficiado al pasar prácticamente desapercibida y hasta burlada. Es así que la percepción general que nos arrojó este “experimento” fue la repetición de palabras como “futuro”, “esperanza”, “cambio” y “líder” en la figura del libertario y por el contrario, que en el Ministro de Economía “pasado”, “tristeza”, “pobreza” y “corrupción”.
Ahora bien, ya lo decían Pedro Buttazzoni y Ezequiel Jiménez en entregas anteriores: por primera vez en mucho tiempo asistimos a una elección de tercios, lo cual bien podría explicar la popularidad de Milei al ser líder de la única fuerza capaz de romper con la polaridad reinante por décadas en el país.
Y quizás sea la determinación, la presunta rebeldía o simplemente la novedad lo que lo posiciona entre los más jóvenes, pero ¿tiene alguna propuesta dirigida a esta juventud? La verdad es que no. Por el contrario, en su plataforma podemos encontrar propuestas como la de fusionar los ministerios de Desarrollo Social, Salud y Educación, eliminar la obligatoriedad de la Educación Sexual Integral e incluso bajar la edad de imputabilidad, pero nada que se traduzca en beneficios directos para ellos.
Pero lo cierto es que por fuera del espacio más votado en las PASO y más allá de alguna propuesta del tipo “más inversión en Universidades y formación terciaria” por parte del integrante de Unión por la Patria, o la reinstauración del "servicio cívico voluntario en valores" de Bullrich (que también se anota en esa de la baja de la edad de imputabilidad), los más jóvenes nuevamente no tuvieron voceros, no estuvieron bien representados y no los hicieron partícipes.
Es entonces que pese a alguna que otra sorpresa como los jóvenes vencedores en las elecciones provinciales de Chubut, Nacho Torres o Maxi Pullaro en Santa Fe, o el batacazo por parte de “el que menos esperábamos”, nada cambió y la credibilidad política sigue cayendo en picada (no por nada el ausentismo récord de este año). Casi sin mujeres y sin jóvenes o propuestas concretas en beneficio de estos sectores.
Así y todo, me pregunto: ¿habrá cambios significativos en la forma de ver y hacer política? ¿Entenderán los integrantes de los diferentes espacios políticos la importancia de frenar esta decadencia y volver a despertar el interés del electorado? ¿O seguiremos asistiendo a escenarios con la nueva vieja política como estandarte?
Sea cual sea la respuesta, tendremos que esperar al menos 2 o 4 años más.
Hasta aquí mi análisis. Te agradezco haberme leído y espero no dejarte tan pesimista, pero si es así o no, te invito a contarnos qué es lo que pensas porque para este equipo es más que importante y por supuesto, recomendarnos. Podes pasar por nuestras redes de Twitter o Instagram o escribinos a contacto@droit.ar
Hasta la próxima!